Cuando construyes tu vida desde el sentido.

Hay un momento en el que la pregunta por la felicidad se transforma; Ya no basta con sentirse bien
o evitar malestar, surge una inquietud más profunda: ¿Para qué estoy aquí? Así comienza el tránsito
hacia el Proyecto de Vida.

Un proyecto de vida no es una lista de metas, es la expresión simbólica de una conciencia que ha descubierto lo que le da sentido. Es una forma de vivir con coherencia, congruencia y dirección. Cuando
esa claridad se asienta, las decisiones dejan de ser dilemas y el esfuerzo se transforma en entusiasmo.

Venimos de un mes que he dedicado a la felicidad y hoy, con este nuevo comienzo de mes, vamos a ver
que es ahí donde empieza todo; la felicidad es el combustible para vivir nuestra vida.

Cuando dejamos de perseguir la vida ideal y comenzamos a vivir con sentido cada paso, estamos construyendo nuestro Proyecto de Vida desde el máximo sentido personal.

¿Qué tiene sentido para ti en este momento y cómo podrías organizar tu día en coherencia con ello?

María Muratet Embuena.

Esta reflexión se basa en los contenidos del Modelo Educativo de Semiología de la vida cotidiana®, creado por el Dr. Alfonso Ruiz Soto®.